Muchas veces afrontamos situaciones complicadas de las cuales no sabemos como salir y tratamos de buscar un buen consejo, un hombro donde apoyarnos para no sentirnos desprotegidos, unas palabras de ánimo, o simplemente un gesto de cariño. Cuando necesites de todo ello, recuerda que existe un ser que te tuvo durante nueve meses en su vientre, sin importarle las molestias propias de la "dulce espera".
Y, que además pasó varias malas noches cada vez que tú necesitastes su ayuda. No crees que porque ya eres todo un hombre, tu madre no puede ayudarte. Al contrario, es ahora, que debes estar cerca de ella porque siempre tendrá la palabra precisa para que tú puedas salir adelante en la vida.
Hagámosla sentir siempre que ella es nuestro refugio, esperanza y consuelo. Hagámosla sentir que nunca dejará de ser nuestra Madre.
Doy gracias a Dios porque todavia a mi edad la tengo cerca de mí y eso es una gran fortuna. Aprovechen la dicha de tenerla cerca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario